Año 1.985. En 1.985 José Ramón Fernández de Casadevante, vendió el Palacio para su habilitación como Hotel. Bajo la dirección de Olga, el hotel adquirió el tono y el prestigio de un delicioso hotel con encanto. La guía de "Pequeños hoteles con encanto" escribía: "Pero el auténtico lujo de esta casa es el toque femenino que impregna todos sus rincones. La sensibilidad y buenas maneras que instilan Olga y su exclusivo equipo de mujeres no encuentran parangón en ningún otro hotel de la zona. Enamoran al huésped porque le regalan a todas horas su sonrisa y saben alumbrarle el verdadero calor de una casa. Dulce molicie de hogar. Definición perfecta de lo que es un hotel con encanto"
Muy poco antes de que Olga y Fernando comprasen el Palacio de Casadevante ,

El salón del Palacio con la Biblioteca

Esta talla de madera de estilo "medieval-barroco" fué devuelta a la Parroquia de Santa Mª de la Asunción y del Manzano, por los nuevos propietarios del palacio, el 27 de Febrero de 1985, recibiéndola Don Ignacio Zabaleta Urmeneta, cura económo de la parroquia quién hacía constar que "este Cristo siempre ha pertenecido a la parroquia"


Sobre el nombre que Olga y Fernando dieron al Hotel, Hotel Pampinot, poco hemos podido averigüar, salvo que, paralela a la calle Mayor está la calle Pampinot, una de las más interesantes del casco histórico de la ciudad:
“calle pampinot. todas las casas de esta calle (s. xvi) son muy interesantes. especial mención merece la casa o palacio de ramerí (núm. 16), cuya fachada adornada con abundancia de dibujos, molduras y recuadros tiorones, es de gran vistosidad. es la sede del instituto francisco de ibero y en el futuro albergará otras instituciones culturales”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario